Vuelvo a la montaña, Cueto Nidio

Este invierno ha sido especialmente frío y ha nevado mucho. Esto ha sido una complicación para hacer excursiones de montaña con la radio. Mi última excursión con la emisora fue a finales de febrero. Después de dos meses he podido hacer de nuevo una excursión sota. Esta vez el objetivo ha sido Cueto Nidio, una cumbre de 1.773 metros situada al lado de Villablino y con referencia SOTA EA1/LE-139.

Esta vez me acompaña Jorge, que es joven, muy fuerte y está en plena forma. Además le hace especial ilusión porque su familia es de esta zona y ya subió de pequeño este pico. Pasamos por Villablino, y tras algunas complicaciones llegamos a Rabanal de Arriba. Seguimos un tramo por una pista forestal muy cuidada y aparcamos a poco más de un kilómetro del pueblo. Esto nos permite ahorrarnos algún tiempo.

Panorámica desde Cueto Nidio al norte. Abajo: Villablino

El día está despejado y la temperatura es suave. La ascensión se hace por un camino forestal hasta la cumbre. Pero el recorrido es largo y bastante pendiente en algunos tramos. Los arroyos bajan con mucha agua. Las cumbres que tenemos a la vista acumulan bastante nieve. El desnivel que tenemos que subir es de unos 600 metros. Nos cuesta algo menos de dos horas llegar arriba. Yo noto la falta de ejercicio de los últimos meses. En el último tramo tengo que parar con frecuencia. Jorge va más que sobrado.

Las vistas desde la cumbre son amplias y bonitas: desde Las Ubiñas hasta la zona occidental de Asturias vemos todos los picos. Por el sur también hay buenas cumbres. Cerca tenemos el Nevadín que hace honor a su nombre. Pero la cumbre misma del Cueto Nidio es muy poco agradable. Está llena de torretas y casetas de comunicaciones. Y para más escarnio están arrancados varios generadores que hacen un ruido fuerte y continuo y nos echan el humo de escape. ¡No acertamos a llegar en el mejor día!

En lo alto de Cueto Nidio con Villablino detrás

Enseguida sujeto la caña a un poste y despliego la antena con ayuda de Jorge. Preparo los equipos y me pongo en la banda de 20 metros. Jorge, que ya ha venido más veces conmigo, se ha traído un libro para leer mientras estoy con la radio. Antes de llamar veo que hay un suizo en otra cumbre, HB9CBR/P, Bruno. Le llamo y enseguida me contesta. Yo le recibo bastante flojo, pero él me escucha bien. Creo que las estaciones base de la cumbre generan algo de ruido eléctrico además del ruido acústico permanente. ¡Mala suerte!

Después me pongo a llamar en la frecuencia habitual: 14.062 MHz. El primero en contestar es SM7DIE, Tore, desde Suecia. Es nuestro primer QSO. Después van contestando los corresponsales habituales desde toda Europa. Me llama la atención Roy, G4SSH, al que hace varios meses que no escuchaba. Es un habitual del diploma SOTA y suele escribir el boletín sota de telegrafía cada mes.

La cumbre del Cueto Nidio con la antena instalada al lado de la cruz

Las señales en la banda de 20 metros no son fuertes, pero nos escuchamos bien. También me contesta IW2OGY/P, Luca, desde otra cumbre en Italia. Cuando ya no tengo corresponsales me paso a la banda de 40 metros, con la esperanza de encontrar gente de España, que en 20 metros no me escucha.

En la banda de 40 metros me empiezan contestando desde Francia, Suiza, Inglaterra, Alemania... El primer español es EA4WT, Jose Antonio, desde Guadalajara. También contesta EA5RU, Francisco en Castellón. Entre tanto me siguen llamando de otros países europeos. Las señales, en general, son mejores que en la banda de 20 metros. Pero no hay demasiado movimiento. Cuando no tengo corresponsales decido pasarme a llamar en fonía.

He avisado por whastapp a un grupo de activadores, casi todos de la zona vasca. No me escuchan. Estoy un buen rato llamando por el micrófono. Solo consigo escuchar una respuesta, es EA2CX, que desde Bilbao me llega muy flojo. He estado un buen rato llamando y nadie más me contesta. Es hora de comer. Apago la radio y vamos a reponer fuerzas.

La emisora en la cumbre del Cueto Nidio

Después de comer vuelvo a intentarlo en fonía. Estoy un rato llamando infructuosamente. Solo me contesta un suizo, HB9OME/P, Robert, que está en otra cumbre en su tierra. Le escucho con dificultad, pero podemos completar el comunicado e intercambiar nuestra referencia de cumbre. Se ve que él ha visto mi anuncio en sotawach.

Como llamando a voz no veo resultado, vuelvo a mi querida telegrafía. Aquí sí que me contestan varias estaciones desde Gran Bretaña, Irlanda, Francia, Alemania... Y otro español: EA7YT, José, desde Málaga. Éste me llega con buenas señales. Cuando son las cuatro menos veinte apago la emisora. En total sumo 32 QSO. Ya he completado mi objetivo y quiero llegar pronto a casa. Intento contactar con Agustín, EA1AV, a través de los repetidores de la banda de dos metros, pero no consigo que me escuche. Es hora de regresar.

El descenso es mucho más rápido. Se agradece separarse de la cumbre con sus generadores y volver al silencio del campo. Por la tarde el sol nos da de cara y hace bastante calor. En el descenso también noto la falta de ejercicio de los últimos meses. Espero estar de nuevo en plena forma pronto. A las cinco de la tarde llegamos al coche. Una buena jornada de radio después de una temporada en barbecho.