viernes, 28 de enero de 2022

Equipo que uso para hacer SOTA

 Sota (Summit On The Air) es un diploma internacional permanente para transmitir desde las cumbres de las montañas. Reúne dos mundos que fusionados son fantásticos: la montaña, deporte por tanto; y la radio, una afición maravillosa. Aquí explico qué equipos de radio uso en mis excursiones radiofónicas por la montaña de León. Solo voy a explicar la parte de radio. Entiendo que para subir a las cumbres se necesita una equipación de ropa, calzado, alimentación, etc, que no voy a explicar porque sale fuera del propósito de este documento.

Montaña y radio. En Peña Ubiña

Durante muchos años he usado mi equipo de base: un Yaesu FT817 como emisora para las excursiones de montaña. Es un equipo muy completo, relativamente ligero y pequeño, y con todas las bandas necesarias, tanto en HF como en V y UHF. Pero no es un equipo especialmente barato y, siendo mi equipo de base, siempre me dio miedo estropearlo. Hace dos años me hice con un equipo mucho más ligero y pequeño: un Venus SW-3B. He ganado mucho en ligereza y espacio en la mochila. A cambio no tengo posibilidad de SSB. Como mi preferencia es CW, no hay problema. Tiene tres bandas: 20, 30 y 40 metros que son ideales para divertirme bastante en mis actividades.

Mi equipo nuevo: Venus SW-3B, libreta, keyer Palm

Además, llevo un talky Anytone AT-D878UV para estar comunicado en VHF y dar oportunidades de QSO en bandas de U-VHF. Incluso tengo posibilidades de usar DMR y de compartir por APRS mi posición. Esto último no lo he conseguido explotar como me hubiera gustado. Quizá tengo que investigar más.

El Anytone AT-D878UV en una cima

También llevo una baliza APRS Sainsonic AP510 que, esta sí, difunde mi posición en todo momento. El problema, no menor, es que no siempre encuentra cobertura de receptores.

Baliza APRS Sainsonic AP510

Todos estos equipos los llevo en mi mochila. Una mochila realmente grande. Al cambiar el FT817 por el SW-3B, necesito menos espacio, pero así no hay problema. En la mochila también va ropa de abrigo, bebida, comida, la caña de soporte y lo que haga falta. Hay sitio.

Mochila con todos los equipos dentro

Todos los equipos los llevo, además, dentro de una bolsa apropiada, que va dentro de la mochila. 

En esta bolsa llevo todo lo necesario para hacer radio. Salvo la caña.

Dentro de esta bolsa, en diversos recipientes van la emisora, la batería, cuerdas, cables, libreta, auriculares.... todo lo que necesito.

Recipientes con todo lo que necesito, salvo la caña: batería, emisora, antena, cables, cuerdas...

Una vez llegado a la cumbre, lo primero es desplegar la antena. Desde hace unos años mi antena es una EFHW, (End Feed Half Wave) una antena de media onda conectada en un extremo y cortada para la banda de 40 metros. En total son, aproximadamente, 20 metros de hilo. Esta antena es multibanda, resuena bien en la banda de 40 metros y en la de 20 metros. Y estoy muy contento con su rendimiento.

La he fabricado con hilo DX-WIRE UL que es muy resistente y ligero. Para recogerlo y desplegarlo uso un carrete de unos 16 cm de diámetro de los usados para hilo de cometas. Es muy cómodo y rápido. En las primeras activaciones usé un dipolo clásico con un balun. Es más engorroso y tiene el mismo rendimiento. Y no es multibanda. El sistema EFHW permite usar menos coaxial para alimentar la antena, puesto que lo conectas en un extremo. Además, es muy fácil de desplegar y recoger. Con este equipo, 5 vatios, y esta antena, he trabajado toda Europa y con frecuencia Norteamérica. En cada activación.
Carrete con la antena recogida

En un extremo de la antena hay un bucle para atar un hilo delgado. En el otro extremo está la banana de conexión y un aro de plástico para atar otra cuerda fina y mantener tensa la antena.
Un extremo de la antena

Las antenas End Feed tienen una impedancia muy alta, así que es necesario usar un adaptador para dejar todo bien acoplado. Al principio usé un Multiband FUCHS ATU que permite acoplar en cualquier banda de HF. Pero me resultaba un poco complicado encontrar el punto de ajuste, tiene tres mandos y hay que encontrar la combinación adecuada en cada banda. Así que hace ya unos años uso el Ilertenna de EA3GCY. Lo monté para que sirviera entre las bandas de 40 y 20 metros. Solo tiene un botón de ajuste y es mucho más cómodo.
El Ilertenna en un extremo de la antena

Como soporte para la antena uso una caña de fibra de vidrio de 9 metros de altura. Es una Evia Dinamic, pero ahora mismo no la encuentro en el mercado. Pesa algo más de un kilo y plegada tiene una longitud de 115 cm. La llevo en una funda de tela y sobresale bastante de la mochila. Para sujetarla llevo unas cuantas cuerdas de 4 mm de grosor y diversas longitudes. Siempre he encontrado manera de fijarla: sobre el vértice geodésico, sobre un árbol, entre rocas... También llevo siempre seis piquetas de aluminio muy ligeras que he tenido que usar en ocasiones. Sobre todo, cuando encuentras una cima lisa, con hierba y sin ningún saliente.
Un caso difícil de despliegue de antena: se necesitaron cuerdas y piquetas

En el extremo de la caña tengo dos ganchos de plástico por los que paso el cable de antena. Uso dos ganchos porque, usando uno, en más de una ocasión se me soltó al subir la caña. Hubo que replegarla de nuevo y volver a empezar. Pasando por dos ganchos es muy difícil que los dos se suelten.
Dos ganchos sujetan el hilo de antena

Para que el hilo de la antena esté tenso, el extremo de la caña se dobla hacia abajo. Con el tiempo se encuentra la medida bastante aproximada de la extensión del cable. El despliegue de la antena suele ser lo que más tiempo lleva al momento de instalar todo en la cima.

Para conectar el equipo a la antena uso un latiguillo de cable coaxial RG174 de unos tres metros. En los dos extremos uso un conector BNC. Este cable es muy ligero, pero quizá un poco frágil. Antes usaba RG58, que es más grueso y robusto, pero más pesado. Cualquiera de los dos son buenos.

Para la alimentación uso una batería LiPo de aeromodelismo tipo 3S de 3.000 mA/h. Proporciona unos 11,1 voltios, más que suficiente para el SW-3B o para el FT817. En cualquiera de los dos casos una carga de la batería me da para varias horas de operación. La batería la llevo en una funda ignífuga. Se necesita un cargador específico para baterías de litio, pero es muy práctica y ligera.
Batería Lipo de 3.000 mA/h y su funda ignífuga

Como ahora trabajo casi exclusivamente en telegrafía, utilizo un manipulador de doble pala mini Palm. Es pequeño y ligero, pero ya no está a la venta. ¡Una pena! Hay varios manipuladores portátiles en el mercado que se pueden usar en la montaña. El SW-3B necesita de unos auriculares para escuchar. Llevo unos auriculares de los que llevan almohadillas y se introducen en el oído, de forma que no se caen.
Libreta, paddle, reloj, emisora y batería en su funda

Para apuntar los comunicados llevo una libreta de papel de tapa dura, más cómoda para escribir sin soporte. Después tengo que pasar todos los comunicados en casa al programa de log. Lleva un rato, pero así reviso con detenimiento todos los QSO. Un pequeño detalle es usar el bolígrafo adecuado. Al principio usaba un Bic, que no suele fallar. Pero en las cumbres muy altas, más de 2000 metros, se salía la tinta por la baja presión. Al final descubrí que lo mejor es usar un Pilot. Escribe muy bien y no se sale la tinta. Por si acaso, siempre llevo un lapicero. Con ese nunca hay problema.
Camino de la cumbre con todo el equipo a cuestas

Un elemento importante para todo es un móvil. Llevo un smartphone Android bastante normal, pero con dos programas importantes: Maverick, para GPS; y SOTA Spotter, para ver qué actividad SOTA, siempre que haya cobertura de datos. Cualquier actividad de montaña debe hacerse contando con un programa de GPS. Te puede evitar algunos sustos desagradables. Cualquiera que te resulte cómodo puede servir. El programa SOTA Spotter resulta muy útil. Por un lado, permite conocer en todo momento qué actividad sota hay y facilitar los QSO de cumbre a cumbre. Por otro lado, te permite anunciarte si no te anuncian otros. Si no sales anunciado en algún clúster, puedes aburrirte soberanamente en la cumbre.

En cuanto a equipo de radio, creo que he explicado todo. También llevo una cámara de fotos, aunque ahora mismo casi siempre uso el móvil para hace fotos y video. Por cierto, el móvil lo llevo en una funda sujeta a la mochila, siempre a mano para consultar el GPS o para hacer fotos.

Mi primera activación sota fue en abril de 2011 en Peña Corada. La experiencia me resultó fantástica. Poder hacer radio en un lugar sin ruido, sin interferencias y siendo el protagonista. A esto se suma la montaña, con sus paisajes, la naturaleza, el esfuerzo de superación. Una actividad muy recomendable para todo radioaficionado con posibilidades de experimentarlo. Ahora mismo llevo más de 180 activaciones. He tenido todo tipo de aventuras y siempre he disfrutado mucho. 

Aviso: ¡es adictivo!

martes, 25 de enero de 2022

SOTA Peña Burero

El pasado domingo, 23 de enero, aprovechando el tiempo estable de que gozamos últimamente, he viajado hasta Paradilla de Gordón para subir Peña Burero. Se trata de una cima sencilla, de 1539 metros de altura, con referencia sota EA1/LE-262. Tenía reservada esta cumbre para el invierno. Ha demostrado ser una buena estrategia. Paradilla es un pueblo pequeñísimo situado en la ladera sur de este macizo montañoso, a algo más de 1200 metros de altura. Se llega por una carretera muy estrecha y virada. Desde lo alto del pueblo hay una vista preciosa.

Vista desde el mirador de Paradilla. Peña Burero está detrás de esas cimas

Dejo el coche en la parte más alta de Paradilla, al lado del mirador de la Peña de la Iglesia. Retrocedo un poco por la carretera hasta tomar una pista que avanza hacia el oeste. Según mis previsiones, esta pista me acercará a la cima subiendo por la ladera. Pero la pista avanza sin apenas pendiente. Encuentro dos carteles metálicos que cuentan una historia. Más adelante localizo una extraña escultura: una mano que sale del fondo de un pozo. A partir de aquí la pista desciende.

Una mano saliendo de un pozo. Al fondo mi objetivo

Es evidente que desde este punto hay que buscar un camino hacia la cima. En la zona cercana hay praderas. Por las laderas hay más vegetación: retamas y robles de poco porte. Desde el principio encuentro sendas de ganado. Procuro ir buscando el camino siguiendo estas sendas. Me permiten cruzar las zonas de vegetación más densa sin problemas.

Al revisar después mi recorrido y los mapas, me he dado cuenta de mi error. En realidad hice un rodeo al tomar una pista no prevista. Mi plan inicial era tomar la pista que sale del medio del pueblo hacia el noroeste y que, por Las Colladas y Cueto Lagos, te deja a media ladera. Hubiera sido el camino más rápido y sencillo, pero sin hacerme perder mucho tiempo, el rodeo me permitió conocer algunas curiosidades.

En naranja mi recorrido. Debía haber tomado la línea negra discontinua hacia el noroeste

Siguiendo las sendas del ganado, encuentro vacas y caballos, voy avanzando hacia arriba sin ninguna dificultad. Poco a poco voy tomando altura. Debajo tengo el valle del río Casares. Al oeste varias montañas entre las que destaca el Cerro Pedroso y el Pico Castro con su antena. Al sur Los Amargones. 

Las sendas del ganado permiten cruzar entre la vegetación sin dificultades

Estando ya cerca de la cima, recibo en el móvil mensajes de otros colegas que están en diversas cumbres de Burgos y Ávila. Están intentando comunicar en la banda de 145 MHz. Parece que al final consiguieron algún QSO de cima a cima bastante interesante. ¡A ver si consigo escucharlos! Aviso que en 10 o 15 minutos haré cumbre. Avanzo con un poco más de prisa y llego a una cima. Hay buenas vistas y parece bastante apropiada para instalar los equipos. Cuando miro el mapa en el GPS me doy cuenta que Peña Burero está un poco más allá. ¡Todo montañero experimentado sabe que la cima siempre está más allá!

Peña Burero es esa roca clara cercana. ¡Pero siempre más allá!

Tengo que retroceder un poco, bajar un pequeño collado y subir de nuevo a la peña correcta. Solo fueron diez minutos más de recorrido. La cima es un promontorio rocoso con algunas plantas que me servirán de soporte para la antena. Nada más llegar hago unas llamadas en la banda de dos metros, por si me escuchan los otros montañeros. Enseguida me contesta Javi, EA1AFB, desde León con muy buena señal. Después se pone su padre Agustín, EA1AV. Pero del resto de montañeros no escucho nada. Están demasiado lejos y yo estoy en una altura poco prominente y entre montañas más altas. ¡En todo caso ya tengo dos QSO!

Vista desde Peña Burero hacia el este. Rodeado de montañas más altas. A la derecha, cercana, la loma que subí pensando que era mi objetivo.

Aprovechando la vegetación de la cima sujeto la caña y extiendo la antena. Sobre unas rocas adecuadas instalo los equipos y encuentro un buen asiento. Al sol se está bien, hay que estar abrigado, pero no paso frío. Apenas hay viento. Hoy se puede estar en la cima bastante tiempo sin sufrir.

Busco una frecuencia libre en la banda de 20 metros. A las primeras llamadas me contestan desde Suecia, SA4BLM, Lars. Enseguida tengo el clásico lío de llamadas desde cualquier país de Europa: Inglaterra, Irlanda, Alemania, Suiza... No hay demasiado jaleo y las señales son, en general, más débiles de lo habitual. Algunos me pasan un RST realmente bajo: 419, 529, 559... algunos con desvanecimiento. En cambio, otros llegan con señales estables y relativamente fuertes.

Mi puesto de radio en Peña Burero

Tras diez minutos de animación, alguien se pone a transmitir en la misma frecuencia. Es bastante molesto. Paro un poco mis llamadas. Busco, sin suerte, algún comunicado con otra cumbre. Son más de las dos y media. Hago una parada breve para comer.

Vuelvo a la radio. Aprovecho para localizar a LA8NHA/P, Stub, un noruego en otra cumbre de su país. Nos intercambiamos 559. ¡Primer QSO de cumbre a cumbre del día! Busco una frecuencia libre y vuelvo a llamar. Las primeras respuestas llegan, de nuevo, desde el norte de Europa. De pronto escucho un indicativo conocido: N4EX, Rich, desde Carolina del Norte, USA. Este último año le he escuchado muy poco. Hoy llega muy bien, él me pasa un 439. ¡No está mal para mi equipo!

Otro ángulo del puesto de radio en Peña Burero

Pronto escucho de nuevo a Agustín, EA1AV y poco después a Javi, EA1AFB, pero esta vez en telegrafía. Un rato más y me quedo sin corresponsales en esta banda. Vuelvo a buscar soteros. Consigo dos QSO más de sota a sota: MM0FMF/P, en Escocia y DL6GCA/P, Armin, en otra cumbre de Alemania.

Es el momento de pasar a la banda de 40 metros. A las primeras llamadas responde, ¡cómo no! Manuel, EA2DT, desde Pamplona. Después me llega la señal atronadora de F4WBN, Christian, en Francia. A continuación, me van llamando principalmente desde toda España. Me hace especial ilusión escuchar de nuevo a Guru, EA2IF, también en Pamplona. Pronto tengo a un colega cercano llamando en la frecuencia que estoy usando. De nuevo tengo que buscar una frecuencia libre para volver a llamar.

La caña sujeta a una rama. El talky a la escucha

Ahora recibo respuestas de toda España y parte de Europa: Francia, Inglaterra, Escocia, Holanda. Escucho una señal débil, es HB9AFI/P, desde una cumbre de Suiza. Completamos un nuevo QSO de sota a sota. Son las tres de la tarde y, aunque se está bien aquí, considero que es hora de apagar. Pero siempre hay alguien más que me llama. Muchos españoles. Son más de las tres y cuarto, cuando ya no me responde nadie. Lanzo un QRT, saludos y gracias y, antes de apagar, busco algún posible montañero a mi alcance.

En una frecuencia poco habitual, 7,010 MHz está MI0TXM/P, Andrew, en algún monte de Irlanda del Norte. Transmite a una velocidad realmente lenta y tiene corresponsales. Después de varios intentos, consigo que me de paso. Pero le cuesta comprender mi indicativo. Se lo tengo que repetir varias veces espaciando bien las letras. ¡Por fin me entiende! Así pude completar el último comunicado con otra cumbre. Ahora sí: es el momento de apagar.

Vista al oeste desde Peña Burero

Es evidente el éxito del programa SOTA. Cada vez hay más activadores en las cumbres y más cazadores desde casa. Esto es muy bueno. Pero el éxito tiene sus pegas: es más difícil operar. Hay que tener mucha paciencia para atender a todos los corresponsales que llaman a la vez. También hace falta paciencia para contactar desde casa con una cumbre. Salvo que tengas muchos vatios.... claro. En mis primeras activaciones, hace más de diez años, lo normal era conseguir entre 15 y 25 QSO atendiendo a todos los que llaman. Ahora fácilmente se duplica o triplica el número de comunicados. 

Recojo todo el equipo y empiezo el descenso. He estudiado el camino de vuelta, seguiré el mismo recorrido de ascensión, pero sin despistes. El sol está bajando y las sombras son largas. En las zonas de umbría hay algo de nieve.

Vista de la cumbre en el descenso

Pronto encuentro las sendas del ganado por las que subí. Es cuestión de seguirlas. No hay ninguna dificultad. De vez en cuando compruebo en el GPS que voy por el camino correcto, el mismo de subida. Llego de nuevo a la mano que sale del pozo. Hay un helicóptero muy bajo que parece ir grabando el paisaje. Llego al pueblo de Paradilla. Son algo más de las cinco de la tarde. Subo hasta el mirador para contemplar el paisaje. Una buena jornada de excursión.

Finalmente conseguí 57 comunicados: dos en la banda de dos metros, 23 QSO en la banda de 20 metros y otros 32 en la banda de 40 metros.

martes, 18 de enero de 2022

SOTA Cutil de Fierro

El primer sábado de 2022 que me he encontrado con buen tiempo y sin compromisos, me he ido a la montaña para hacer mi primera activación sota del año. Es objetivo fue el Cutil de Fierro, de 1544 metros de altura y referencia sota EA1/LE-261. En realidad, es un monte elevado sobre una explotación de carbón a cielo abierto en proceso de cierre. La cima está totalmente explanada y libre de vegetación. Es una escombrera parcialmente rehabilitada. Hay dos caminos sencillos de ascensión: desde Orzonaga o desde Coladilla. Son dos poblaciones al este de la cima. Elegí Coladilla por ser un recorrido más corto y con un poco menos de desnivel. A cambio es ladera norte, que en invierno no recibe el sol y, por tanto, muy fría. Casi me arrepiento.

El Cutil de Fierro: zona explanada. Hay una mancha de nieve, sobre ella una enorme piedra

Cuando llego a Coladilla es mediodía. A pesar de estar al sol de enero, la temperatura que marca el coche es de -2ºC. Desde la parte oeste del pueblo parte una pista amplia que va ascendiendo hacia mi destino. Al inicio de la ruta hay algunos charcos totalmente congelados. Tengo que pasar con cuidado. Enseguida entro en la sombra de la montaña. Todo el camino y el paisaje cercano está completamente escarchado. Muy bonito, pero muy, muy frío. A pesar de caminar cuesta arriba y de ir con cuatro capas de abrigo y guantes, paso algo de frío.
La pista totalmente helada. El Cutil está tras el árbol deshojado

La pendiente no es fuerte, salvo algunos tramos cortos. A medida que voy tomando altura, en momentos breves, me llega algo de sol directo. Se agradece bastante.

Detrás de mí, al este, queda Coladilla. A la derecha el Correcillas con algunos neveros

En algunos tramos del camino puedo ver el pueblo de Coladilla, de donde he partido. Más allá de él, está la imponente masa del pico Correcillas con rastros de nieve. Delante tengo mi objetivo, aunque no tengo claro dónde está la cima. Se aprecia un bulto, desde abajo parece una pequeña construcción que, supongo, es la cima. Después comprobaré que, en efecto, es la cima, pero no es una casa ni nada parecido.
Construcción para el ganado. Ya estoy en zona soleada. ¡Qué bien!

Después de una cuesta un poco más fuerte, llego a la altura de una construcción para el ganado. Ahora estoy ya en zona soleada. ¡Se agradece mucho! Poco más tarde llego a un collado donde la pista se divide. Por un lado llega el camino que viene desde Orzonaga, por otro lado la pista sigue hacia la vieja mina. Tras un momento de duda, decido seguir por la cresta de la montaña hacia la cima. Hay sendas de ganado que pasan entre el brezo y las matas de roble. ¡Es el camino correcto!

En algunos momentos encuentro zonas de robles o retama que dificultaría el avance si no fuera porque sigo las sendas estrechas que encuentro. La pendiente no es fuerte. A un lado del camino localizo una cruz que parece sacada de un cementerio. Es la cruz de los mineros. Al fondo ya se ve con claridad la cima.

La cruz de los mineros. Detrás, la zona más clara, es el Cutil de Fierro

Paso una primera cima poco elevada y llego de nuevo a una pista. Hay dos montones de enormes piedras. El segundo parece un hito de los que ponen los montañeros para indicar el camino correcto. Pero este es de proporciones colosales.
¿El hito más grande del mundo? ¡Estoy en el camino correcto!

Al oeste tengo el enorme hoyo del que hasta hace pocos años sacaban carbón. El sol está muy bajo y casi de frente. Me deslumbra. Al otro lado de la mina, un poco más alto, el Cueto San Mateo.
El hoyo de la mina. Detrás el Cueto de San Mateo

Sigo las huellas de la pista hacia la cima. Como ya conté, es una explanada artificial. El punto más alto está al norte, al final del todo. En medio de la explanada un monolito. Lo que pensé que era una construcción, es en realidad una enorme piedra. Y, desde luego, no marca el punto más alto.
Explanada con el monolito. El punto más alto está al fondo

Avanzo hacia la parte más alta. Se acaba la zona explanada y empieza un bosque de robles muy bajos. La cima está en ese bosque. Pero serán solo dos o tres metros más alto que la zona explanada en la que me encuentro. No merece la pena entrar entre los robles. Será difícil no enredar la antena entre las ramas. ¡Me quedo en la explanada!
La antena instalada en la explanada. Detrás el boque de robles, apenas más alto

El entorno cercano es más bien desolador. Pero el paisaje lejano es fantástico. Tengo montañas imponentes por todas partes, salvo por el sur, donde se aprecia la planicie de la meseta. Al oeste están las Ubiñas con bastante nieve. Al norte el Fontún sin nieve, delante de él, el Alto del Salguerón. Al este destaca el Correcillas. Detrás Peña Galicia y Peña Valdorria. Entre las dos se aprecia la cima nevada del Espigüete. Más a la derecha, a lo lejos, Peñacorada.
Vista al oeste. El macizo de las Ubiñas con bastante nieve, a lo lejos

El día está totalmente despejado, ni una nube. Estoy al sol y apenas sopla una leve brisa del sur, pero hace frío. Sujeto la parte inferior de la caña en una mata y con tres riostras la mantengo vertical. Despliego la antena. Voy a empezar en la banda de 20 metros, como habitualmente.

Antes de empezar a llamar miro el clúster. Está DL3TU/P, Roman, en una cumbre de Alemania. Le escucho bien, le llamo. Enseguida me contesta. ¡Ya tengo el primer QSO, y de sota a sota! Busco una frecuencia libre y empiezo a llamar. La primera respuesta viene de Suiza: HB9BHW, Hans. A continuación, van respondiendo de toda Europa: Suecia, Inglaterra, Alemania...

Mi puesto de transmisión en Cutil de Fierro

Uno de los corresponsales es Agustín, EA1AV, siempre pendiente de mis actividades. La propagación está extraña: algunas estaciones llegan muy fuerte y otras muy flojas. Un caso significativo es IK1GPG, Massimo. Siempre llega muy fuerte, pero esta vez sus señales son flojas. A pesar de estar al sol y con apenas viento, hace frío. Y estoy incómodo. La última respuesta me viene de Javi, EA1AFB, que se está iniciando en la telegrafía. Son más de las dos y media. Paro para comer.

La antena en lo alto del Cutil de Fierro

El agua que llevo en la mochila está más fría que si la acabara de sacar del frigorífico. Durante la comida hago un par de llamadas en la banda de dos metros. Enseguida me contesta Agustín, EA1AV, y a continuación su hijo Javier, EA1AFB. Llegan bien, León está casi a la vista. No hay más corresponsales. Tras la comida vuelvo de nuevo a la radio. Pero esta vez me pongo en la banda de 40 metros.

Otra vista del puesto en el Cutil de Fierro

Después de unas pocas llamadas me responde, como no, Manuel, EA2DT, desde Pamplona. Manuel es el máximo cazador de sotas del mundo, con más de 300.000 puntos. Los demás corresponsales, pocos, son todos de España, salvo un francés. Me hizo especial ilusión contactar con Guru, EA2IF, un buen amigo, aunque todavía no nos hemos visto en persona. No hay mucho movimiento en esta banda. Y estoy incómodo por el frío, así que decido recoger todo y descender.

Panorámica de la cima con todo instalado

Antes de apagar, compruebo que en la banda de 20 metros está Juerg, HB9BIN, en una cumbre de Alemania. A pesar del QRM consigo que me escuche y completamos el QSO con algunas dificultades. Ahora sí, apago la emisora y recojo los trastos. He completado 27 comunicados: 20 en la banda de 20 metros, otros 5 en la banda de 40 metros y los dos de voz en la banda de 2 metros. Suficiente por hoy.

Tras una rápida recogida, tomo el camino de la mañana en sentido inverso. Me tengo que fijar con atención y consultar el GPS para localizar la senda por la que subí entre las retamas. Una vez en el collado, ya no hay dificultad. Ahora hay algo más de sol, pero está muy bajo y apenas calienta. En la zona más baja vuelvo a encontrar todo el paisaje totalmente congelado, aunque la temperatura es ahora ligeramente superior a los cero grados. Cuando llego al coche, ya está a la sombra. Con menos frío, la primera excursión del año hubiera sido más agradable, pero estamos en enero y esto es León.

lunes, 3 de enero de 2022

SOTA La Mora

Después de un mes de diciembre complicado por diversas vicisitudes, llega el fin de año con tiempo estable y sin compromisos importantes. El último día del año quedé con mi amigo Javier, uno de los pocos que disfruta conmigo estando parado en las cumbres, para hacer una excursión sencilla. Nos fuimos a La Mora, un monte en el que existió una explotación de carbón a cielo abierto, ya abandonada. Situada en la comarca de Babia, tiene una altura de 1581 metros y referencia sota EA1/LE-257.

Camino de ascenso a La Mora

Salimos de León con niebla y frío, pero a los pocos kilómetros desapareció la niebla y encontramos un cielo casi despejado. Para iniciar el camino tomamos una carretera estrecha y casi abandonada que nos deja al sur de nuestro objetivo. Desde aquí parte una pista que asciende el monte en zig-zag. Enseguida te das cuenta de que esta pista se usa muy poco, porque en algunos tramos crece el brezo en medio de ella.

Por toda la ladera sur del monte hay vacas pastando. La ladera está llena de brezo, aunque de vez en cuando se encuentran grupos de abedules. La temperatura es suave para ser el último día de diciembre. El sol, aunque bastante bajo, calienta lo suficiente para hacer agradable la ascensión.

Restos de la antigua explotación

A medida que ascendemos vamos encontrando tramos en los que se aprecian las huellas de la antigua explotación minera: cortes en la montaña, charcas artificiales, pequeñas escombreras. El entorno cercano no es muy agradable. Pero las montañas próximas, más altas casi todas, son imponentes. Ya cerca de la cima, la pista se convierte en una senda entre las retamas. La senda rodea la cima, así que en la parte alta hay que dejar el camino y buscar un paso al punto más alto.

Aquí el avance se hace bastante penoso. Nos quedamos en un punto un poco despejado que no es la cima, pero cumple perfectamente con la norma de los 25 metros de prominencia como zona válida para la activación. Hacia el noreste vemos el valle de Babia y al fondo las cimas imponentes de las Ubiñas con bastante nieve. Al norte tenemos diversas cumbres también nevadas. El paisaje cercano no es gran cosa, pero el lejano es formidable.

Panorámica al noreste. La cresta cercana es El Pando, a la derecha Las Ubiñas

Aprovechando una mata grande de brezo, sujeto la caña y despliego la antena. Mientras Javier se toma un buen descanso yo acabo de instalar la emisora. Antes de empezar a llamar consulto los anuncios de actividad sota en el clúster. ¡Hay un montón de actividad en toda Europa! EA2GM, Javier, está activando una sota en Asturias. Me pongo es su frecuencia, pero no le escucho. Pero sí escucho a F8FEO/P, en una cumbre de Francia. Pronto consigo que me confirme el QSO. Después consigo otro QSO de sota a sota con HB9DPR/P, Tom, en las montañas de Suiza. Intento algún QSO más de sota a sota, pero, o no me escuchan o tienen demasiado jaleo. ¡Buen comienzo!

Antena en La Mora

En las frecuencias habituales de sota, alrededor de los 14.062 MHz, hay mucha actividad, así que tengo que buscar una frecuencia libre poco habitual en mí: 14.059 MHz. A las pocas llamadas me contesta DL3HXX, Lothar, desde Alemania. Enseguida empieza el jaleo de colegas llamando desde toda Europa. Parece que la propagación está bastante bien y hay muchos corresponsales llamando. ¡Un fin de año muy animado!

En un momento de poco jaleo escucho a Agustín, EA1AV, con buenas señales. Agustín estuvo a punto de acompañarme. A ver si la próxima vez no hay pegas.

Tengo otros dos corresponsales que me llaman desde distintas cumbres: HB9AFI/P, Kurt, en Suiza; y DL/HB9CYV/P, Christian, que, aunque es suizo, está en una cumbre de Alemania. Me siguen llamando desde toda Europa. En otro momento de calma escucho con señales muy, muy bajas a EA1AXW, Oscar, desde Santander. A pesar de escucharle tan bajo, podemos completar el comunicado.

A eso de las dos menos cuarto de la tarde ya he contestado a todos los que me llaman. Antes de pasarme a la banda de 40 metros busco yo otros corresponsales en cumbres. Así consigo comunicar con Juerg, HB9BIN/P, en Suiza. ¡Es el segundo máximo activador sota del mundo! A continuación, completo otro QSO de sota a sota con S51RU/P, Marjan, en Eslovenia.

Vista al norte desde mi punto de transmisión

Cuando pasan de las dos de la tarde me pongo en la banda de 40 metros. A las primeras llamadas me contesta EA1DMP, Miguel Ángel, desde Ávila. Después de van contestando de toda España y desde Inglaterra, Suiza, Bélgica, Francia... Esta banda está menos poblada. Antes de las dos y media he contestado a todos los corresponsales. Busco posibles corresponsales en cumbres, pero no encuentro a nadie. Es hora de apagar y comer. No recojo los trastos, por si después de la comida hay alguna actividad interesante.

Tras una comida tranquila con Javier vuelvo a encender la emisora, miro el clúster. No encuentro nada interesante. Toca recoger. Apago la emisora y empiezo la recogida. El carrete sobre el que enrollo la antena está roto del todo, se han salido las bolas, totalmente inútil. Me toca enrollar la antena a mano.

Antes de desplegar la antena, el carrete azul ha perdido un tornillo

Ya en casa, al mirar las fotos veo que el carrete ha perdido un tornillo, con el movimiento debió perder el otro y se desmontó por completo. ¡A ver si se puede arreglar antes de la próxima activación! Tardo un poco más en tener la mochila lista. No hay prisa. El descenso es tranquilo. Por el camino aprecio detalles del paisaje que no había visto en la subida. El sol está ya muy bajo. Ha sido una jornada de excursión y radio muy fructífera y tranquila. Además, estos días hay muchas activaciones sota en toda Europa. ¡Buena forma de acabar el año!

Hoy completé 48 comunicados, con 6 de ellos de sota a sota. El año 2021 realicé 20 activaciones sota. ¡Espero superarlas en el 2022!