El Abedular, sota EA1/AT-041

Primer domingo de octubre. Se acabaron los largos días del verano. Hay que buscar cumbres que no lleven demasiado tiempo pues oscurece más pronto. Pero cualquier cumbre nueva para mí estará a más de una hora de viaje en coche. Por fin me decido por El Abedular, sobre el Puerto de Tarna, frontera con Asturias. Tiene referencia sota EA1/AT-041 y 1816 metros de altura. Para mí es un pico nuevo, pero ya ha sido activado como sota en cuatro ocasiones. En principio es un pico sencillo de subir, con poco más de 300 metros de desnivel.

Vista de El Abedular por la tarde, con el cielo totalmente despejado

Pero llegar hasta el Puerto de Tarna en coche me lleva hora y media, pasando por Boñar, Puebla de Lillo y el puerto de Ventana. Además la previsión es que haya nubes abundantes al principio de la mañana. Incluso podría llover un poco. Llego a Tarna poco después de las once de la mañana. Efectivamente está cubierto de nubes, pero no llueve. Aunque ha llovido recientemente, la vegetación está muy mojada.

Desde lo alto del puerto se sigue la carretera hacia el este unos 200 metros y se toma una pista forestal que empieza a subir suavemente. La pista bordea el Abedular. Voy buscando una senda de ascensión. No la encuentro. La pista empieza a descender y alejarse del objetivo. En una ladera bastante despejada emprendo la subida. ¡A ver si hay suerte!

Por esta ladera emprendo el ascenso

Siguiendo las sendas que dejan los animales voy ascendiendo por la ladera. En ocasiones pierdo la pista, pero pronto la recupero de nuevo. La temperatura es suave. A ratos sale el sol entre las nubes. Desde el norte, pasan nubes que se deshacen al superar las cumbres. Voy tomando altura, la cima está cada vez más cerca. Un poco por encima de la cota de 1650 metros encuentro una senada clara que lleva a la cima. Ahora no hay duda de qué ruta seguir.

Vista al sur a mitad de la ascensión

Pronto llego al collado Cotalbo. Ahora la cima está ya muy cerca. Unos minutos más y consigo llegar arriba. Es una pequeña planicie con vegetación de monte bajo y una pila de piedras con un hierro bien sujeto. Alrededor de la cumbre hay una zanja larga, pero poco profunda y con ramificaciones. Son, sin duda, restos de trincheras. Las nubes van y vienen del norte según sopla el viento. Cuando el paisaje queda despejado al sur, las vistas son fantásticas. Tengo cerca el Pico Lago, un poco más lejos, a la izquierda, la mole del Mampodre. Al este tengo un gran valle verde. A lo lejos, en ocasiones se aprecia la inconfundible silueta del Espigüete. La ascensión me ha llevado 70 minutos desde el Puerto de Tarna.

La cumbre de El Abedular entre las nubes. Se aprecian bien las trincheras

Me abrigo un poco más para protegerme del viento frío y húmedo y enseguida me pongo con la antena. Sobre el hierro de la cima sujeto la caña y despliego la antena. Instalo el equipo. Veo que hay bastante actividad de sota en las bandas. Escucho primero en la banda de 40 metros, pero no logro encontrar nada interesante. Me pongo en la banda de 20 metros y empiezo a llamar. El primero que contesta es IX1OEN, Andrea, en el norte de Italia.

Pronto se forma un buen lío de gente llamando desde toda Europa: Alemania, Suiza, Gran Bretaña, Francia... Me tienen bastante entretenido. Después de 20 minutos atendiendo a todos, en un momento de más tranquilidad escucho a Agustín, EA1AV, desde León, con señales bajas, pero bien recibido. Ya casi a punto de cambiar de banda me llama F6HBI/P, Gerald, desde una cumbre de los Pirineos franceses. ¡Por fin un QSO de cumbre a cumbre! Antes de cambiar de banda localizo a 9A/G4ONL/P, Víctor, un inglés en una cumbre de Croacia. ¡Otro comunicado S2S al log!

La emisora en la cumbre del Abedular. Entre las nubes se aprecia el paisaje

Me paso a la banda de 40 metros. ¡Aquí sí que hay jaleo! Alrededor de los 7.032 MHz. hay varios activadores sota trabajando. Entre ellos está Guru, EA2IF/P. Le escucho muy flojo, con algo de desvanecimiento. Le llamo varias veces, pero tiene muchos corresponsales y no me escucha. Lo dejo por el momento. Otro corresponsal es F6HBI/P. Le llamo y me contesta, ya lo había contactado antes en la banda de 20 metros.

Entretanto Guru se ha pasado a la banda de 20 metros. Allí no podré escucharle. Me pongo en su frecuencia y empiezo a llamar. El primero que me contesta es HB9AGO, desde Suiza. Enseguida tengo un montón de corresponsales llamando todos a la vez. Les voy contestando: EA3AVV, Ramón, en Sabadell; EA2DT, Manuel, en Pamplona, siempre atento a toda actividad sota. También llaman de Francia, Italia, Suiza, Inglaterra. Uno de los corresponsales es Ignacio, EA2BD desde Pamplona, que ya es un buen amigo.

La antena instalada en El Abedular. El cielo se va despejando. En Asturias siguen las nubes

En esta banda llegan muchas estaciones de toda España. Hay bastante jaleo. Y en ocasiones acaba resultando desagradable. Estás contactando con un corresponsal y alguien llama en medio de su respuesta con señales más fuertes. Le pides al corresponsal que repita, le vuelven a tapar. Y así varias veces. Acabas escuchando el reporte del primer corresponsal y le das paso al que llega fuerte. Una vez... y no responde. Otra vez... sigue sin responder. Una tercera... nada. Das paso a otro corresponsal. Cuando este último te responde, vuelve el que llegaba fuerte tapando al nuevo corresponsal otra vez. ¡Increíble falta de educación! Y esto varias veces.

Estoy a punto de apagar y dejarlo. No soporto este menosprecio. Pero hay muchos colegas educados que no se merecen desatenderlos. Me armaré de paciencia y seguiré atendiendo a todos. Cuando alguien llega muy fuerte, pisando a los demás, la única forma de que te deje seguir es dándole paso y acabar pronto. Es muy lamentable, pero es así.

Agua acumulada en el acoplador que escurre por el cable de la antena

Sigo atendiendo a todos los corresponsales. Salen muchos desde España. Un domingo a última hora de la mañana es una hora punta para activaciones. Entre los que me llaman está Marco, EA1SB, desde León con señales bastante buenas. Entre el jaleo escucho un "S2S", alguien en una actividad sota desde otra cumbre. Le doy paso, es EA4DON/P, Alejandro, en la cumbre EA1/AV-033, Peñagorda, en Ávila. Sus señales son estupendas. Completamos el QSO. Otro más de Sota a Sota. A primera hora intenté escucharle en modo SSB, pero no pudo ser. Ahora todo muy bien. Alejandro está activando este año muchas sotas en distintas partes de España. Incluso en León. Hace unos 15 días activó la cumbre en la que estoy ahora.

Sigo atendiendo a los que me llaman. A eso de las dos y media no tengo más corresponsales. Busco en la banda y no hay nada interesante. Es hora de comer. Apago la emisora. Mientras como, me doy cuenta que en el acoplador de la antena se acumula agua. Esto me ha ocurrido más veces. Al estar entre las nubes se condensa agua en el cable de la antena y escurre hasta el extremo. Habrá que secarlo bien antes de guardarlo.

A última hora ha despejado casi del todo

Mientras me tomo el bocadillo estoy atento a los anuncios del clúster sota a través del móvil o escucho un rato la banda de 40 metros. Recibo a un alemán, DL3VTA/P, Michael, que llama desde una sota. Le contesto y completamos el QSO. Pero la referencia que me pasa es del diploma sota alemán. Su cumbre no está en el sota internacional. ¡Mala suerte!

Acabo de comer y veo que no hay nada nuevo en las bandas. Hago algunas llamadas con el talky en 145.525 MHz. Agustín me confirma que desde León no se me escucha. Nadie contesta. Son cerca de las cuatro. Quiero llegar pronto a casa. Así que es hora de recoger. El cielo se ha despejado en su mayor parte. Por el lado asturiano quedan algunas nubes, pero el sur está soleado. Me cuesta plegar la caña de fibra. Con el frío y la humedad se ha quedado bloqueada. Con un poco más de esfuerzo todo queda recogido. Es hora de descender.

Vista al este desde la cumbre. Un bonito valle. En la ladera se aprecia la senda para llegar a la cumbre

Observando las laderas desde la cumbre, decido que lo mejor es descender por el mismo camino de ascensión. A media ladera seguiré la senda hasta donde me lleve. La bajada es rápida y sencilla. A partir de media ladera, en algunos tramos, la senda atraviesa zona de plantas espinosas. Menos mal que llevo pantalón largo. Y todavía me pincho un poco. En algunas zonas la senda se pierde, no está claro por dónde seguir. Después vuelve a aparecer. No hay un camino evidente.

Al final llego a la pista forestal por la que inicié la ascensión. Ahora descubro un hito que marca el punto supuestamente más apropiado para la ascensión. En todo caso, por donde subí me fue bien. Enseguida llego al coche. Es buena hora para regresar.

La jornada acabó con 53 comunicados, 25 en la banda de 20 metros y 28 en la de 40. Todos en telegrafía. Algo más de una hora de actividad. Una jornada entretenida en una zona muy bonita y asequible.