Pico Lázaro

El último domingo de marzo he aprovechado para hacer una excursión sota al Pico Lázaro, de 1906 metros de altura y referencia sota EA1/LE-118. El acceso a este pico parte de la localidad de Lois. Este pueblo pertenece al municipio de Crémenes y tiene un conjunto de edificios históricos impresionante. Destaca su iglesia, que recibe el sobrenombre de Catedral de la Montaña. Esta vez me acompaña mi amigo Javier.

Vista del Pico Lázaro desde el Collado Peñalavera. Punto de acceso más sencillo.

Llegados a Lois, seguimos hasta el final del pueblo, hacia el norte. Pasamos por La Hoz, donde bajan las primeras aguas del río Dueñas. Giramos a la derecha, hacia el este, por El Abedular. Realmente es un bosque de robles con algunos abedules. La pendiente es fuerte, pero es una pista forestal amplia en buen estado para los caminantes. Llegamos a las proximidades del collado de los Cerezales. Encontramos una caseta de madera bien construida, que parece ser de los cazadores. Hay unas buenas praderías y unas vistas extraordinarias al suroeste. Las cumbres y las zonas de sombra presentan bastantes manchas de nieve.

Vistas al suroeste desde el collado de los Cerezales.

Pasado este collado la pista desciende. Encontramos un nevero que cubre el camino. A nuestra izquierda debe partir una senda que nos lleve al collado de Peñalavera, a los pies de nuestro objetivo. No vemos el camino, pero procuramos seguir las indicaciones del GPS siguiendo la traza. Nos adentramos en un bonito bosque de hayas por el que es fácil transitar. La pendiente es fuerte y con frecuencia encontramos nieve. Tras deambular un rato por el bosque sin rumbo claro, localizamos por fin la senda buscada. Es un camino estrecho, pero bien marcado que cruza el bosque sin grandes desniveles hacia nuestro objetivo.

Cruzando el bosque de hayas por la senda

A medida que avanzamos por la senda hacia el norte de la ladera van apareciendo manchas de nieve. En algunos momentos cubren el camino y hacen difícil localizar el recorrido de la senda. En algunos tramos se despeja el bosque y se presenta ante nosotros un paisaje imponente.

Panorama desde la senda

Tras cruzar algunos neveros y mojarnos un poco lo pies, llegamos al collado de Peñalavera. Este es el punto de ataque a la cima del Pico Lázaro que nos queda al sur. Hay una pendiente fuerte de casi 300 metros de desnivel. Al principio hay una amplia zona con retamas, pero hay senda para cruzarla. La pega es que, a medida que ascendemos, encontramos más nieve que dificulta el paso. Al cabo de un rato de caminar Javier se siente mal. Paramos a comer un poco. Después él decide quedarse en este lugar. No se encuentra con fuerzas y humor para llegar a la cumbre. Seguiré yo solo. Son cerca de las dos de la tarde.

Supero la zona de piornos y nieve. Ahora entro en una zona de grandes rocas sueltas. Me muevo bien en este terreno. Por fin consigo llegar a la zona alta, el cordal que lleva a la cima. Sigue siendo una zona de grades rocas sueltas.

Al fondo la cima del Pico Lázaro

A todo esto, el día empezó bastante despejado, con algunas nubes. Ahora las nubes prevalecen sobre los claros. Incluso algunas aparecen bastante oscuras y amenazadoras, pero no esperamos lluvia. El talky que llevo habitualmente, un Dynascan D48, lleva un tiempo con problemas. Hoy no hay manera de que se ponga en las frecuencias memorizadas. Solo me permite poner manualmente la frecuencia. Definitivamente ha quedado inoperativo. Tiene nueve años y muchas montañas subidas. Ya cumplió con creces.

En poco tiempo llego a la cumbre. El panorama es impresionante: cerca, más bajo, el pico del Mediodía con sus antenas y su acceso fácil. Más al este el bonito pico Yordas. Tras este, a lo lejos, el Espigüete. Los tres son sotas que tengo pendientes. Más cerca el Gilbo y Peñas Pintas, al sur más montañas. Al oeste el Mampodre. Con prisa por no dejar mucho tiempo solo a Javier, instalo las cosas.

En la cumbre del Lázaro con todo instalado

Entre las rocas encuentro la manera de sujetar la caña que sostiene la antena. Tras algunas pequeñas pegas para desplegarla, preparo la emisora. Como tengo el acoplador ajustado para la banda de 40 metros, en contra de mi costumbre, empiezo en esta banda. Me pongo en 7.032 MHz y empiezo a llamar. El primero en contestar es DL1FU, Friedrich, desde Alemania. Un habitual cazador de sotas. Después empieza el jaleo: EA2DT, José, desde Pamplona, después Inglaterra, Portugal, Suiza, Francia, Suecia... También me llama desde León Agustín, EA1AV, siempre pendiente de mis excursiones. La propagación no está bien, pero me da para un rato de diversión. Cuando contesto a todos los que me llaman decido cambiar a la banda de 20 metros. Antes del cambio miro a ver si hay algo interesante.

Veo anunciado a DL/HB9DQM/P, Manuel, un suizo (al menos tiene indicativo suizo) que está en una cumbre de Alemania: DM/BW-001. Enseguida le escucho, le llamo y me contesta. ¡Ya tengo un QSO de cumbre a cumbre!

Panorama al norte desde la cumbre. En primer plano la ladera por la que se asciende.

Empiezo a llamar en 14.062 MHz. El primero en contestar, una vez más, es Richard, N4EX, desde Carolina del Norte, USA. Después contestan algunas estaciones más de Europa. También comunico de nuevo con Agustín, EA1AV. En esta banda la propagación tiene mucho desvanecimiento, mucho QSB. El tiempo va pasando y se hace tarde. Tengo a Javier solo en la ladera. Son más de las cuatro y cuarto de la tarde. Es hora de recoger. Cuando aviso de que apago, -paso a QRT- escucho a alguien que llama. Antes de apagar pido repetición. Es VE1WT, Phillip, desde Nueva Escocia, en Canadá. Llega bien. Completamos QSO y directamente apago. Es demasiado tarde.

Mientras recojo, el viento trae algunos copos de nieve congelada. Pero no pasa de eso. Desciendo rápido, aunque con cuidado. Llego a la altura de Javier. Ha disfrutado de un buen descanso. Seguimos hacia abajo. Retomamos la senda que cruza el bosque. Desde arriba he podido ver que esta senda parte desde lo alto del collado de Peñalavera. Retomamos la senda en sentido inverso. Los neveros dejan imágenes curiosas:

El agua corre bajo un nevero.

Ahora cruzamos el bosque sin perdernos en ningún momento. Conocer el camino ayuda mucho. Llegamos al collado de Peñalavera y seguimos por la pista hacia Lois. La pendiente es fuerte y tras el esfuerzo se nota bastante. Llegamos a Lois sin más novedad que cierto retraso sobre lo previsto. El tiempo nos ha respetado. No ha llovido ni se espera que llueva este día.

En total completé 24 comunicados: 17 en 40 metros y otros 7 en la banda de 20 metros. Todos en telegrafía. Definitivamente una buena jornada. Eso sí, tengo que ir pensando en hacerme con un nuevo talky.